En En Estado Crudo hemos dedicado varios artículos a hablar sobre diferentes aspectos relacionados con las dietas veganas y, en un sentido menos restrictivo, también con el vegetarianismo. Nos hemos centrado también en la parte sostenible de este tipo de dietas, que tienen en común el estar basadas en el consumo mayoritario de productos vegetales y en el rechazo, de manera más o menos estricta, de los productos de origen animal.
Pero el veganismo no hace referencia únicamente a una opción de alimentación que excluye de la dieta los productos de origen animal, si bien esta es una parte fundamental de la aplicación práctica de esta forma de pensar. En cambio, se trata más bien de una filosofía de vida que puede extrapolarse también al resto de ámbitos de nuestro día a día. Y uno de los terrenos de aplicación más importantes del estilo de vida vegano, más allá de la dieta, no es otro que el del mundo de la moda y del calzado.
Por eso, en este artículo queremos prestar atención al mundo del calzado vegano, dedicando unos minutos a ver qué entendemos por zapatos veganos, cuáles son las principales ventajas y desventajas de este tipo de calzados, y qué tipo de materiales empleados en la fabricación de zapatos y calzado en general pueden considerarse compatibles con la práctica del veganismo.
¿Qué son los zapatos veganos?
Los zapatos veganos, o cualquier tipo de calzado vegano, no son más que zapatos manufacturados a partir de materias primas en las que no hay materiales de origen animal. Siendo el cuero, es decir, la piel curtida y trabajada de algunos animales, la materia prima principal sobre la que se ha sustentado la industria mundial del calzado durante siglos, los zapatos veganos son sin duda una alternativa interesante para todas aquellas personas afines al veganismo o para gente con cierta sensibilidad por el sufrimiento animal.
Como veremos a continuación, la introducción de nuevos materiales en la fabricación de calzado, sobre todo durante la segunda mitad del siglo XX, ha permitido que el calzado vegano sea hoy en día una realidad. Sin embargo, el auténtico reto actual radica en la obtención de materiales veganos, pero también sostenibles. Y es que muchos de los zapatos y zapatillas que se comercializan en la actualidad pueden ser considerados veganos, en tanto que no emplean materiales de origen animal en su composición. Pero, sin embargo, estos calzados no dejan de ser productos poco sostenibles, elaborados en base a materiales sintéticos derivados del petróleo y de otros hidrocarburos. Y por ello la huella ecológica de su uso y consumo es alta. Un impacto ecológico que conlleva, entre otros, contaminación por plásticos, altas emisiones de CO2 y otros gases de efecto invernadero, producciones y distribuciones masivas, uso de materiales no reciclables ni biodegradables, etc.
Ventajas más importantes de los zapatos veganos
Sea como fuere, lo importante es que conozcamos las peculiaridades del calzado vegano para saber identificar este tipo de productos y, en base a ello, poder tomar nuestras decisiones de uso y consumo con criterio propio.
Y con este objetivo, aquí vemos las principales ventajas que nos puede ofrecer el calzado vegano:
- Aunque ya decimos que no tiene por qué ir de la mano, lo cierto es que los calzados elaborados con materiales veganos a menudo también están fabricados bajo criterios más respetuosos con el medioambiente.
- Muchos de estos zapatos veganos ofrecen una mayor durabilidad y resistencia con respecto de sus homólogos convencionales fabricados con cuero y pieles.
- Suelen emplear materiales naturales de procedencia vegetal, por lo que este tipo de zapatos veganos normalmente presentan menos problemas reacciones alérgicas.
- Normalmente, los zapatos veganos son más económicos que los zapatos elaborados en piel.
Principales desventajas de los zapatos veganos
Pero como ya adelantamos, además de las destacables ventajas que pueden aportarnos los zapatos veganos y el resto de calzado de este tipo, estos pueden conllevar en algunos casos también algunas desventajas.
Algunas de ellas sería estas:
- No todos los zapatos veganos son ecológicos ni tampoco sostenibles.
- Incluso los zapatos elaborados a partir de fibras textiles vegetales y otros materiales naturales no vinculados a un origen animal pueden tener una forma de producción no sostenible. Es el caso de los grandes cultivos intensivos de algodón, de palma, etc.
Materiales de uso más común en el calzado vegano y qué materiales para calzado no podemos considerar como veganos
Para saber si un zapato está elaborado con materiales veganos o no bastará que nos fijemos en la etiqueta de composición proporcionada por el fabricante. Deberemos prestar atención tanto a los materiales empleados para la elaboración de la cubierta del calzado, como los usados para hacer la parte interior y el forro, la suela y, en su caso, también el material de elaboración de los cordones u otros posibles elementos de cierre y sujeción. E incluso deberemos fijarnos idealmente también en el tipo de adhesivos empleados en la fabricación del calzado, ya que algunos de ellos podrían ser también de origen animal. Si bien esta última información por lo general no suele venir detallada en la etiqueta de composición de los productos y deberemos hacer nuestras propias indagaciones.
En base a lo anterior, vamos a encontrar habitualmente tanto materiales veganos como no veganos en la composición de nuestros zapatos y en la del calzado disponible en el mercado.
Los materiales veganos más comunes en la elaboración de calzado serían:
- Materiales sintéticos de naturaleza plástica, como el poliuretano, el poliéster, el PVC, el vinilo y otros. (Estos no son ecológicos aunque los reciclados contribuyen a reducir la contaminación)
- Tejidos naturales de origen vegetal: algodón, cáñamo, lino (Si son orgánicos, mejor)
- Sucedáneos del cuero de procedencia vegetal o sintéticos: cuero sintético de microfibra, Piñatex, etc.
- Caucho, goma. (Si es reciclado, mejor)
- Corcho, madera, bambú, yute etc.
Entre los principales materiales no veganos encontraremos:
- Cuero y pieles sometidas a otro tipo de tratamientos.
- Ante.
- Gamuza.
- Tejidos de origen animal como la seda o la lana (pashmina, cachemira, angora).
- Hueso, pelo, plumas, etc.