Asegúrate de tener percarbonato de sodio, una pastilla de jabón natural y bicarbonato de sodio a mano. También necesitarás un cepillo de dientes, un recipiente grande y agua caliente.
Utiliza un rallador para rallar una pequeña cantidad de jabón na tural en pastilla. Esto facilitará su disolución en el agua.
En un recipiente, disuelve el jabón rallado con un poco de agua caliente. Luego añade unas cucharadas de percarbonato de sodio y bicarbonato de sodio. Mezcla bien hasta conseguir una pasta espesa y homogénea.
Con la ayuda de un cepillo de dientes, aplica la pasta blanqueadora en las zonas manchadas de las zapatillas. Asegúrate de cubrir todas las zonas que necesitas blanquear.
Coloca las zapatillas en un área al aire libre donde puedan recibir luz solar directa y déjalas secar durante 12 horas. La acción del sol ayudará a potenciar el efecto blanqueador de los ingredientes.
Enjuaga las zapatillas con un poco de agua tibia para eliminar cualquier residuo de la pasta blanqueadora. Luego, déjalas secar al aire libre.
Ahora que tus zapatillas están limpias y secas, están listas para ser usadas nuevamente. Repite este proceso según sea necesario para mantenerlas siempre blancas y relucientes.